Las autoridades indicaron que muchas personas se encontraban todavía atrapadas en las oficinas cercanas a la gran explosión que estremeció los cimientos de las edificaciones de la capital noruega un kilómetro a la redonda.
Según el corresponsal de la BBC en Oslo, Dejan Radojevic, Stoltenberg no estaba en la sede en el momento de la explosión.
Un comunicado del gobierno confirmó que Stoltenberg se encuentra bien.
Imágenes de la televisión noruega mostraban un gran daño: calles cubiertas de escombros y vidrio proveniente de ventanas destrozadas por la explosión, además de humo emanando de algunos edificios y polvo flotando en el ambiente.
En la calle se veían los restos de al menos un automóvil.
Según el corresponsal de la BBC, aún hay confusión sobre el origen de la explosión. La policía noruega sospecha que se trató de un auto bomba, pero aclaró que no tiene certezas al respecto.
Incluso testigos citados por medios locales indican que hubo una segunda explosión, pero esto no ha podido ser confirmado por las autoridades.
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