Una modelo egipcia, que acaba de cumplir 20 años tras las rejas y que podría estar encerrada de por vida, asegura que su marido trató de estrangularla y que fue en ese momento cuando ella lo golpeó en la cabeza y después le enterró unas tijeras en la espalda.
Omaima Nelson saltó a la fama en los relatos policiales cuando se conoció que asesinó a su marido un fin de semana de Acción de Gracias en 1991. De acuerdo con los fiscales, Omaima mató a su marido a sangre fría y lo tenía todo planeado, mientras que la defensa alega que ella lo apuñaló para defenderse de un ataque.
"Si no me hubiera defendido, ya estaría muerta", aseguró la egipcia. "Siento lo que ocurrió, pero estoy feliz de haber podido sobrevivir". Pese a sus declaraciones, las autoridades que analizan su caso aseguran que la mujer es un peligro para la sociedad, por lo que seguirá encarcelada de forma indefinida.
El caso tomó una relevancia completamente distinta cuando en el juicio un psiquiatra testificó que la mujer le dijo que se había llegado a comer las costillas de su marido, lo que luego Omaima negó.
Este no es su primer intento de conseguir la libertad condicional, en el año 2006 la Justicia le negó el beneficio por ser considerada un peligro público.
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