El embarazo es la principal causa de muerte para las
adolescentes de todo el mundo, cobrándose la vida de miles de ellas cada
año o dejándolas gravemente enfermas, según denuncia la organización
defensora de los derechos de la infancia Save the Children.
Puede resultar paradójico que el proceso por el
que un ser nace a la vida se califique como el "mayor causante de la
muerte de adolescentes" en el mundo, pero las cifras hablan por sí
solas.El informe de Save the Children "El derecho de toda mujer: cómo la planificación familiar salva vidas de niños" muestra una realidad desoladora, pero al mismo tiempo ofrece algunos mecanismos para intentar revertir la situación.
Embarazos prematuros y consecutivos
La raíz del problema, dice Save the Children, está en la falta de acceso a métodos anticonceptivos y la poca planificación familiar que reina en muchos países, generalmente los más poblados del planeta.Niñas y adolescentes de entre 15 y 18 años de edad se casan y quedan embarazadas poco después del matrimonio, cuando sus cuerpos aún no están preparados para gestar una vida.
No sólo eso. También el hecho de que se produzca otro embarazo demasiado pronto después de un parto, es peligroso tanto para la madre como para el bebé.
"El cuerpo de estas jóvenes no está preparado, pueden desarrollar fístulas por un parto prolongado"
George Kijana, director de proyectos de Save the Children en Liberia
Permitir el acceso de las mujeres a la planificación familiar de manera que puedan retrasar la concepción por lo menos tres años después de haber dado a luz reduce el riesgo de complicaciones para la madre y el niño, y puede salvar hasta 1,8 millones de vidas cada año.
Pero la realidad indica que cerca de 222 millones de mujeres de todo el mundo que no desean quedarse embarazadas, no tienen acceso a la contracepción.
0 Comentarios