NUEVA YORK._ Aunque fue el policía Ramysh
Bangali que mató de un balazo al bodeguero dominicano Reynaldo Cuevas,
luego de confundirlo con uno de tres asaltantes, las autoridades
acusaron al trío de supuestos delincuentes de ser los responsables del
homicidio, alegando que el hecho ocurrió por ellos estar asaltando a
punta de pistola la bodega donde trabajaba el criollo.
Los imputados, Orlando Ramos, Ernesto Delgado y Christopher Dorsey, se declararon no culpables el pasado viernes del asesinato de Cuevas al ser instruidos de cargos por asesinato en segundo grado, robo a mano armada, asalto y posesión ilegal de un arma criminal.
Los investigadores dicen que el dominicano iba huyendo de los atracadores, cuando el oficial Bangali lo confundió con uno de los cacos y lo ultimó de un disparo, después de haberlo tirado al pavimento, como revela una imagen en el video de la cámara de seguridad del establecimiento "Anelys Deli Grocery", situado en la avenida Franklin en El Bronx.
Los imputados, acompañaron por sus abogados, le respondieron al juez que en ningún momento ninguno de ellos hizo el disparo fatal a Cuevas y por el contrario, salieron huyendo de la bodega al percatarse de que la policía había sido llamada a la escena.
El oficial tenía su arma empuñada y en Comisionado de Policía Raymond Kelly dijo que la muerte del dominicano fue "accidental". Los familiares de Cuevas han estado reclamando justicia contra el policía y reclaman que la imagen en el video es irrefutable porque presenta el hecho con toda claridad.
Los tres detenidos incursionaron en la bodega situada en el 631 de la calle 168 Este en El Bronx. Un primo del bodeguero muerto, identificado como José García, relató que su pariente al ver a la policía en los alrededores del establecimiento levantó las manos, pero tropezó con el oficial y cayó al suelo.
En ese momento el policía le fue encima y le disparó sin titubear, según testigos presenciales y la imagen en la cámara de seguridad.
"El arma se disparó accidentalmente por lo que vimos en el video", dijo el comisionado Kelly al respecto.
Los imputados, Orlando Ramos, Ernesto Delgado y Christopher Dorsey, se declararon no culpables el pasado viernes del asesinato de Cuevas al ser instruidos de cargos por asesinato en segundo grado, robo a mano armada, asalto y posesión ilegal de un arma criminal.
Los investigadores dicen que el dominicano iba huyendo de los atracadores, cuando el oficial Bangali lo confundió con uno de los cacos y lo ultimó de un disparo, después de haberlo tirado al pavimento, como revela una imagen en el video de la cámara de seguridad del establecimiento "Anelys Deli Grocery", situado en la avenida Franklin en El Bronx.
Los imputados, acompañaron por sus abogados, le respondieron al juez que en ningún momento ninguno de ellos hizo el disparo fatal a Cuevas y por el contrario, salieron huyendo de la bodega al percatarse de que la policía había sido llamada a la escena.
El oficial tenía su arma empuñada y en Comisionado de Policía Raymond Kelly dijo que la muerte del dominicano fue "accidental". Los familiares de Cuevas han estado reclamando justicia contra el policía y reclaman que la imagen en el video es irrefutable porque presenta el hecho con toda claridad.
Los tres detenidos incursionaron en la bodega situada en el 631 de la calle 168 Este en El Bronx. Un primo del bodeguero muerto, identificado como José García, relató que su pariente al ver a la policía en los alrededores del establecimiento levantó las manos, pero tropezó con el oficial y cayó al suelo.
En ese momento el policía le fue encima y le disparó sin titubear, según testigos presenciales y la imagen en la cámara de seguridad.
"El arma se disparó accidentalmente por lo que vimos en el video", dijo el comisionado Kelly al respecto.
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