A pesar de la fuerte lluvia, decenas de curiosos y fieles se
congregaron hoy en la Plaza de San Pedro del Vaticano para esperar el
resultado de la segunda votación.
La renuncia de Benedicto XVI, la primera de un papa en 600 años, parece haber sacudido los cimientos de la Iglesia y no parece existir un consenso claro entre los cardenales sobre si el futuro pontífice debe ser un gestor que ponga orden en el Vaticano o un pastor carismático capaz de inspirar a los fieles en tiempos de crisis.
CIUDAD DEL VATICANO - El humo negro
volvió a asomar hoy miércoles por la chimenea de la Capilla Sixtina,
anunciando que la Iglesia Católica sigue sin nuevo papa.
Los 115 cardenales votaron por segundo día de cónclave en sesión matutina y la fumata negra anunció que sin haber acuerdo.
Se espera una segunda fumata por la tarde hora local. Solo si fuera blanca significaría que hay un papa electo.
Decenas
de curiosos y fieles rezando se congregaron desde primera hora en la
Plaza de San Pedro del Vaticano a pesar de la fuerte lluvia que ha caído
sobre Roma estos días.
Ampliar en titulo
Ampliar en titulo
La renuncia de Benedicto XVI, la primera de un papa en 600 años, parece haber sacudido los cimientos de la Iglesia y no parece existir un consenso claro entre los cardenales sobre si el futuro pontífice debe ser un gestor que ponga orden en el Vaticano o un pastor carismático capaz de inspirar a los fieles en tiempos de crisis.
Durante
más de una semana, las congregaciones de cardenales evaluaron a puerta
cerrada la situación de la Iglesia con el objetivo de hacerse una idea
bien formada del perfil que necesita el nuevo papa, pero los debates
terminaron entre dudas y cuestiones sin resolver.
Las
finanzas de la Santa Sede, en particular de la banca vaticana, han
quedado en entredicho por supuestas acusaciones de corrupción.
Este
asunto, unido al famoso caso Vatileaks, el informe redactado por tres
cardenales sobre la filtración de documentos confidenciales de Benedicto
XVI, ha marcado las reuniones previas al cónclave.
0 Comentarios