
Una casa que rastrea todo movimiento a través de tu automóvil y automáticamente se calienta antes de que llegues a casa. Un tostador que habla con tu refrigerador y anuncia cuando el desayuno está listo a través de tu televisor.
Emocionante o aterrador, estos dispositivos conectados del hogar “inteligente” futurista
puede ser familiar para los fanáticos de la ciencia ficción. Ahora la
industria de la tecnología los convierte en una realidad.
Los objetos
físicos mundanos a nuestro alrededor se conectan a redes, al comunicarse
con dispositivos móviles y entre sí para crear lo que se llama un
“Internet de las cosas”, o IoT.
Los hogares inteligentes son solo un segmento;
automóviles, ropa, fábricas y todo lo demás que puedas imaginar
eventualmente también será “inteligente”.
Pero hay una trampa: hasta ahora, la mayoría
de los productos de Internet de las cosas son un enredo de diferentes
protocolos inalámbricos y marcas. Muchos pueden comunicarse con sus
propias aplicaciones y ecosistemas pero no encuentran una forma de jugar
bien entre sí. El termostato Nest, que puede adaptarse a tus hábitos de consumo de energía, es solo un ejemplo.
Estos dispositivos y ecosistemas independientes ejecutan su propiosoftware y
hablan diferentes idiomas. Tu tostador inteligente tartamudea en
francés, por ejemplo, mientras que tu refrigerador te habla sobre fechas
de caducidad en japonés.
Ahora el fabricante de chips, Qualcomm,
intenta darle a la industria un gran impulso con un proyecto de código
abierto que puede vincular todas estas piezas dispares. Qualcomm espera
que su plataforma, llamada AllJoyn, pueda actuar como una especie de traductor universal para la industria.
En los últimos cuatro años, Qualcomm trabaja
en su protocolo AllJoyn para conectar dispositivos de diferentes
fabricantes, incluso si tienen diferentes estándares de comunicación.
Quiere ser el idioma de facto que tu refrigerador, bombillas y puerta
del garaje utilicen para comunicarse.
"La única forma de que esa visión pueda
realizarse es si convertimos esto en un verdadero esfuerzo panindustrial
con empresas en todo el mundo”, dijo Liat Ben-Zir, director de
administración de productos de Qualcomm.
Escoger un estándar
Muchos estándares ya ayudan a comunicar a
dispositivos inteligentes, aunque ninguno ha surgido como una opción
dominante todavía. Algunas empresas, como SmartThings, Lowes y Revolc, dependen de un centro físico para vincular dispositivos.
Los expertos dicen que este mercado luchará
para despegar realmente hasta que alguien pueda convencer a los grandes
jugadores de que lo mejor es trabajar con otras marcas.
"Podríamos ver surgir algunos grandes
ecosistemas para (el Internet de las cosas), como los que tenemos hoy
con Android, iOS y Windows. Pero a los consumidores les gusta tener
opciones y demandarán que los sistemas cerrados aprendan a comunicarse
entre sí”, explicó Karen Bartleson, presidenta de la Asociación de
Estándares IEEE.
Si hay demasiados ecosistemas diferentes, las
personas encontrarán una forma de conectarlos; más o menos como el
problema de múltiples cargadores de teléfono se resuelve con microUSB,
dijo.
"Debido a que (el Internet de las cosas) es
tan grande y variado, será difícil idear un estándar de ‘un tamaño que
encaje con todo’”, dijo Bartleson. “En lugar de un solo estándar
dominante de comunicación para el IoT, probablemente habrá varios que
sirvan para propósitos diferentes”.
Una empresa con un tanto peso en la industria
como Qualcomm podría tener suerte al conectar las brechas. Es un
movimiento inteligente de negocios: el gigante de la tecnología
inalámbrica fabrica muchos de los chips encontrados en smartphones y
tabletas. También vende los chips que irán dentro de los termostatos
inteligentes, sistemas de seguridad, automóviles y todo lo demás.
Pero la revolución de las cosas conectadas
solo funcionará si todas las empresas y productos encuentran una forma
de romper las barreras y trabajar juntos, de acuerdo con Ben-Zur.
"A menudo pensamos en esta evolución de
internet en dos revoluciones. La primera fue el internet conectado”,
dijo. “El segundo tipo de revolución fue cuando de repente fuimos al
internet móvil”.
Poder acceder al internet desde nuestros
bolsillos simplemente no es tan revolucionario porque es portátil. Los
dispositivos recolectan y comparten información sobre nosotros a través
de sensores integrados, como acelerómetros y GPS. El internet se vuelve
una vía doble donde compartimos contexto sobre nuestra ubicación,
ambiente y hábitos para que pueda mostrar información personalizada.
Una tercera revolución
Ben-Zur predice que el Internet de las cosas
será la tercera revolución. Los sensores aparecerán en más y más
dispositivos y los convertirán en esponjas que absorban datos sobre
nuestros hábitos, ambientes, movimientos y salud.
Un detector inteligente de humo, por ejemplo,
también podría reunir información sobre el conteo de polen en una casa.
Los detectores de movimiento de un sistema de seguridad en casa pueden
rastrear los movimientos y ubicación de una familia con el paso del
tiempo, al compartir información con un sistema central de calefacción o
enfriamiento para personalizar la temperatura de cada habitación.
Pero todavía es muy pronto para decir con
certeza cómo hablarán todos estos dispositivos entre sí y si AllJoyn de
Qualcomm u otra opción despegará.
Las aplicaciones populares exactas para el
Internet de las cosas también son un misterio. Realmente no sabemos cómo
la tecnología cambiará nuestras vidas hasta que estemos en las manos de
los desarrolladores creativos.
“Los chicos que han ejecutado lo móvil durante
20 años no tenían idea de que algunos desarrolladores iban a tomar la
pantalla táctil, un micrófono y algunos recursos gráficos para convertir
un teléfono en una flauta”, dijo Ben-Zur.
Eso mismo puede ser verdad cuando los
desarrolladores comiencen a experimentar con aplicaciones para aparatos
del hogar conectados.
“Exponer eso, cómo tu cepillo de dientes, tu
calentador de agua y tu termostato… van a interactuar contigo, con tu
escuela, eso es lo que sigue”, dijo Ben-Zur.
0 Comentarios