Aparece en la vida, interfiriendo en la actividad cotidiana
Santo Domingo. ¿Cuántas veces se ha
preguntado cuán normal es sudar mucho? El sudor excesivo puede causar
estragos en la vida cotidiana, alterando nuestra manera de comportarnos
entre los demás. La causa puede ser la hiperhidrosis, que es sudoración
excesiva en ciertas zonas localizadas, o en todo el cuerpo (axilas,
palmas y pies).
El doctor Manuel Cochón Aranda, médico dermatólogo con más de 20 años de experiencia, explica que en toda la superficie cutánea existen glándulas sudoríparas, denominadas ecrinas que son responsables del sudor, un mecanismo importante en la regulación de la temperatura corporal.
“Si hace calor, se suda para reducir la temperatura, y se mantenga el equilibrio térmico corporal que en promedio son 37 grados Celsius”, detalla el dermatólogo, profesor de dermatología de las universidades Iberoamericana (Unibe) y Autónoma de Santo Domingo (UASD).
Las causas son múltiples, y varían, dependiendo de si se trata de hiperhidrosis en una zona específica, es decir, localizada; o en todo el cuerpo, generalizada.
La hiperhidrosis fisiológica por calor ambiental es una respuesta normal del organismo por causas metabólicas como la diabetes, hipertiroidismo, hipoglicemia; infecciosas, como la tuberculosis, malaria; medicamentos, como algunos neurolépticos, opioides, serotonina; y la hipotensión arterial.
La más común de las hiperhidrosis es la esencial o idiopática, donde no llega a descubrirse una etiología específica, en ocasiones hay historia familiar de este padecimiento, y la persona presenta sudoración excesiva ante situaciones mentales y emocionales.
Factores como el stress y la ansiedad provocados por situaciones de la vida cotidiana pueden detonarlo; así que enfrentarse a un examen médico, entrevista de trabajo, examen académico, conocer alguna persona, son situaciones que activan la sudoración en las personas que lo padecen.
Según explica el especialista, esos pacientes no presentan la sudoración durante el sueño, y la patología comienza a aparecer generalmente antes o en la pubertad; tiende a mejorar en la vida adulta.
Los tratamientos existentes consisten en controlar o eliminar la causa utilizando presentaciones de uso tópico de derivados de aluminio en concentraciones específicas para reducir o controlar la sudoración excesiva.
Esos productos se aplican en las zonas de mayor sudoración, generalmente axilas, manos y pies, pero deben ser indicados por un especialista y aplicados de forma correcta para que sean útiles y seguros.
Existen otras modalidades de tratamiento que no son aplicables en todas las áreas del cuerpo, tales como la iontoforesis, paso de una corriente eléctrica débil a través de la piel, útil en casos de sudoración en manos y pies.
Desde hace unos años se utiliza la inyección de toxina botulínica (Botox) con muy buenos resultados a mediano largo plazo.
El especialistas señala que, en casos bien evaluados y seleccionados se puede realizar un procedimiento quirúrgico llamado simpatectomía transtorácica, por medio de la cual personal cirujano especializado secciona o corta la rama neural involucrada en la zona de sudoración.
Recomendaciones
Siempre es importante usar ropa fresca adecuada al clima, de algodón, mantenerse hidratado ingiriendo agua o jugos de frutas, según recomienda el doctor Cochón Aranda, y aconseja mantener ventilación con circulación de aire en casa y lugares de trabajo.
Señala que no hay registros de estadísticas que identifiquen si afecta más a hombres o a mujeres, ambos géneros son igualmente propensos.
La hiperhidrosis en casos de enfermedades o causas conocidas no es prevenible, es una manifestación parte del cuadro.
El impacto en la calidad de vida es alto, ya que a las personas que padecen hiperhidrosis en palma de manos se les dificulta saludar, escribir, agarrar cosas que pueden mojar o resbalarse por la humedad excesiva.
Pueden padecer eczema de manos, por la misma humedad, y suelen aislarse socialmente por su condición, lo que les causa ansiedad y afectación emocional, creándose un círculo vicioso de emoción intensa, sudor, emoción.
En los casos axilares, la persona se limita a usar ropa de colores y texturas con las que no se note mucho la humedad axilar, que se convierte otro motivo de ansiedad y frustración social.
Cualquier paciente que presenta sudoración excesiva en áreas específicas del cuerpo o generalizada, debe ser evaluado sistémicamente, intentando encontrar una causa orgánica que explique esa situación.
Luego de eso, pudiera concluirse en que se trata de una sudoración esencial o idiopática, debido a causas emocionales o a una respuesta autónoma fisiológica en determinadas personas.
El doctor Manuel Cochón Aranda, médico dermatólogo con más de 20 años de experiencia, explica que en toda la superficie cutánea existen glándulas sudoríparas, denominadas ecrinas que son responsables del sudor, un mecanismo importante en la regulación de la temperatura corporal.
“Si hace calor, se suda para reducir la temperatura, y se mantenga el equilibrio térmico corporal que en promedio son 37 grados Celsius”, detalla el dermatólogo, profesor de dermatología de las universidades Iberoamericana (Unibe) y Autónoma de Santo Domingo (UASD).
Las causas son múltiples, y varían, dependiendo de si se trata de hiperhidrosis en una zona específica, es decir, localizada; o en todo el cuerpo, generalizada.
La hiperhidrosis fisiológica por calor ambiental es una respuesta normal del organismo por causas metabólicas como la diabetes, hipertiroidismo, hipoglicemia; infecciosas, como la tuberculosis, malaria; medicamentos, como algunos neurolépticos, opioides, serotonina; y la hipotensión arterial.
La más común de las hiperhidrosis es la esencial o idiopática, donde no llega a descubrirse una etiología específica, en ocasiones hay historia familiar de este padecimiento, y la persona presenta sudoración excesiva ante situaciones mentales y emocionales.
Factores como el stress y la ansiedad provocados por situaciones de la vida cotidiana pueden detonarlo; así que enfrentarse a un examen médico, entrevista de trabajo, examen académico, conocer alguna persona, son situaciones que activan la sudoración en las personas que lo padecen.
Según explica el especialista, esos pacientes no presentan la sudoración durante el sueño, y la patología comienza a aparecer generalmente antes o en la pubertad; tiende a mejorar en la vida adulta.
Los tratamientos existentes consisten en controlar o eliminar la causa utilizando presentaciones de uso tópico de derivados de aluminio en concentraciones específicas para reducir o controlar la sudoración excesiva.
Esos productos se aplican en las zonas de mayor sudoración, generalmente axilas, manos y pies, pero deben ser indicados por un especialista y aplicados de forma correcta para que sean útiles y seguros.
Existen otras modalidades de tratamiento que no son aplicables en todas las áreas del cuerpo, tales como la iontoforesis, paso de una corriente eléctrica débil a través de la piel, útil en casos de sudoración en manos y pies.
Desde hace unos años se utiliza la inyección de toxina botulínica (Botox) con muy buenos resultados a mediano largo plazo.
El especialistas señala que, en casos bien evaluados y seleccionados se puede realizar un procedimiento quirúrgico llamado simpatectomía transtorácica, por medio de la cual personal cirujano especializado secciona o corta la rama neural involucrada en la zona de sudoración.
Recomendaciones
Siempre es importante usar ropa fresca adecuada al clima, de algodón, mantenerse hidratado ingiriendo agua o jugos de frutas, según recomienda el doctor Cochón Aranda, y aconseja mantener ventilación con circulación de aire en casa y lugares de trabajo.
Señala que no hay registros de estadísticas que identifiquen si afecta más a hombres o a mujeres, ambos géneros son igualmente propensos.
La hiperhidrosis en casos de enfermedades o causas conocidas no es prevenible, es una manifestación parte del cuadro.
El impacto en la calidad de vida es alto, ya que a las personas que padecen hiperhidrosis en palma de manos se les dificulta saludar, escribir, agarrar cosas que pueden mojar o resbalarse por la humedad excesiva.
Pueden padecer eczema de manos, por la misma humedad, y suelen aislarse socialmente por su condición, lo que les causa ansiedad y afectación emocional, creándose un círculo vicioso de emoción intensa, sudor, emoción.
En los casos axilares, la persona se limita a usar ropa de colores y texturas con las que no se note mucho la humedad axilar, que se convierte otro motivo de ansiedad y frustración social.
Cualquier paciente que presenta sudoración excesiva en áreas específicas del cuerpo o generalizada, debe ser evaluado sistémicamente, intentando encontrar una causa orgánica que explique esa situación.
Luego de eso, pudiera concluirse en que se trata de una sudoración esencial o idiopática, debido a causas emocionales o a una respuesta autónoma fisiológica en determinadas personas.
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